
El fiscal de Pinamar, Juan Pablo Calderón consideró que la muerte de Alicia
Sánchez, la joven que cayó en la madrugada del domingo desde un décimo piso
por el hueco de un ascensor en esa ciudad costera en una fiesta, no fue un
femicidio, tras recibir un informe preliminar de su autopsia.
El estudio practicado en la morgue judicial reveló que la joven de 25 años sufrió
múltiples lesiones en su caída al impactar contra el ascensor que estaba varios
pisos abajo. La autopsia determinó que alguien llamó al ascensor luego de que
cayera, lo que provocó que fuera arrastrada y así se generaron nuevas lesiones.
El cráneo de la víctima no presentó fracturas pero sí traumatismos que le
causaron múltiples coágulos. Tenía también golpes en el tórax y en el abdomen, lo
que le produjeron un paro cardio-respiratorio y un shock hipovolémico.
El titular de la UFI N°4 de Pinamar cree que la muerte de Sánchez se trata de un
homicidio culposo. Los diversos testimonios recabados hasta el momento no
apuntan que haya sido un femicidio y todo pareciera concluir que la puerta del
ascensor se abrió y que Alicia cayó por el hueco.
La joven cayó el domingo en la madrugada desde un décimo piso, cuando se
disponía a bajar para abrirle la puerta de entrada del edificio a una amiga en la
avenida Constitución, entre Simbad y Del Libertador. Sánchez estaba junto a
familiares y algunos amigos en una fiesta íntima. Nadie escuchó ruidos fuertes o
gritos esa noche.
Como Alicia no le abría la amiga volvió a insistir con el timbre del portero y ahí su
familia empezó a buscarla por la zona común del edificio. Uno de ellos notó que la
puerta, del ascensor estaba abierta en el décimo piso. Al descender por las
escaleras, encontraron el cuerpo de la joven, que luego fue rescatado por personal
de Bomberos Voluntarios y de la Policía Bonaerense.
Aún no se reveló la información referida a la
habilitación técnica del elevador y sobre los
controles cotidianos al que debe someterse para su
correcto funcionamiento. La imputación podría ser
de homicidio culposo contra los responsables del
mantenimiento de ese ascensor.
Alicia tenía una hija de cuatro años y vivía en
Ostende. Había estudiado la carrera de Martillera y
Corredora Pública de la UADE y se encontraba en
Pinamar para visitar a su familia.
(Fuente: Infozona)